A los 185 años de la Declaratoria de la Independencia recordamos un hito que marca el proceso fundacional de nuestro país y a la vez nos plantea desafíos. Las leyes: Ley de Independencia, Ley de Unión a las Provincias Unidas del Río del la Plata y la Ley del Pabellón, declaradas en el peñón de la Florida marcan nuestro presente.
Luego de años de dominio extranjero nos reconocemos como independientes de todo poder foráneo pero el revisionismo histórico plantea interrogantes, ¿En qué fecha realmente nos independizamos? Para algunos historiadores en 1825, para otros en 1828, con la firma de la Convención Preliminar de Paz. Debate que sigue hasta el presente.
Aquellos orientales, al plantear inmediatamente la unión a las otras Provincias del Río de la Plata se reconocían como integrantes de una unidad mayor que, sin olvidar diferencias, identificamos como el verdadero camino de la libertad. La búsqueda de esa unidad es un objetivo vigente en lo regional y a nivel de toda Latinoamérica.
Es el legado y la ardua tarea para nuestras generaciones; tomar la posta y construir un país en donde la identidad no signifiquen aislacionismo sino integración e inclusión y para ello es imprescindible que la independencia no sea sólo política que abarque todos las ámbitos.
En éstos días en que estamos tentados a confundir libertad e independencia con nostalgia, recordamos y pensemos el mensaje de los fundadores de la Patria.
¡¡¡¡ VIVA LA PATRIA !!!!
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