Ediles tuvieron elogiosos conceptos ante el centenario de diario EL TELEGRAFO
En cumplimiento de lo resuelto, ante inquietud de la edila Nilda Belvisi, del Partido Colorado, el plenario de la Junta Departamental realizó sesión especial de homenaje a los 100 años de diario EL TELEGRAFO, presidida por el edil Francisco Debali. En representación de nuestra casa periodística estuvieron presentes su director, Fernando Alberto Baccaro Viñoly y el administrador, Enrique Baccaro Pesce.La edila Nilda Belvisi, al hablar por el Partido Colorado, sostuvo que EL TELEGRAFO “se convierte en el imprescindible vínculo con la comunidad, exaltando los valores esenciales de la democracia y la libertad. La presencia de la prensa independiente y de incidencia intelectual y moral constituyen un elemento decisivo en la vida de un país, impregnándolo de un sistema de valores. Es así que tanto como los creadores, los aventurados, los emprendedores, como los centros educativos o las iglesias, perfilan una sociedad, también EL TELEGRAFO participa como actor fundamental para marcar rumbos”.
Destacó que “desde el año 1935 -en que se crearon las juntas departamentales- ha venido cubriendo las sesiones de este deliberativo, convirtiéndose en el imprescindible vínculo con el público lector. En este ámbito es donde se vierten las más diversas opiniones de todos los partidos políticos y se pone de manifiesto claramente lo que significa la independencia y objetividad de la prensa que, en este caso, ha brindado igualdad de oportunidades a todas las filosofías y credos, sin censura alguna, asegurando la libertad de expresión y proporcionando espacios con generosidad, más allá de las circunstancias”.
“El diario nació y creció junto a los sanduceros -afirmó la edila- estuvo y está al servicio de la gente, de la comunidad, de su sentir, de sus proyectos, de las demandas frente a las diversas situaciones. Su permanente defensa y vigilancia de los principios esenciales que conforman un estado de derecho, un irrenunciable compromiso con el medio en que actúa, han marcado su camino y su destino. Tenemos la convicción de que en su independencia y pluralidad ha estado y sigue estando su fuerza y su vigencia”.
Refirió también que “ya Miguel Arturo Baccaro, cofundador de EL TELEGRAFO con Angel Carotini, recorría la campaña y recogía el requerimiento de los habitantes del medio rural, acercándose al lector a través de crónicas, narraciones y relatos”. Tuvo un recuerdo para Fernando J. Baccaro, Argentina Pesce y Fernando M. Baccaro, que ya no nos acompañan físicamente, así como para el administrador Enrique Baccaro y el director Fernando Alberto Baccaro Viñoly, el personal y los canillitas sanduceros, la evolución tecnológica de nuestro diario y el aporte de servicio a otras empresas editoras del Interior.
Expresiones del FA
Luis Lopardo fue quien habló por la bancada del Frente Amplio, afirmando que “cuando alboraba el siglo XX el Uruguay terminaba el período histórico denominado ‘comercial, pastoril y caudillesco. Las últimas guerras civiles que enfrentaron a los orientales terminaban dando paso a la ansiada estabilidad política, el Uruguay moderno amanecía de la mano de José Batlle y Ordoñez”.
Citó al historiador Barrán para precisar ese marco y orden que “se basaba en el respeto a la propiedad privada que englobaba el latifundio en la campaña, la creencia en que el progreso del país radicaba en el crecimiento hacia afuera, mediante la explotación de sus ventajas naturales...” y “por fin la creencia de que la marcha de la sociedad sería armoniosa si el Estado no interviniera para proteger a los débiles frente a los fuertes”.
Afirmó que “en ese marco, la sociedad sanducera no podía ser ajena a estas inquietudes y desafíos.
Las nuevas ideas que venían del viejo continente también se plasmaron en el campo de la prensa y así nace EL TELEGRAFO el 1º de julio de 1910. Eslabón de una cadena que había conocido antecesores, entre otras publicaciones, como El Obrero en 1879, El Pueblo en 1881, Gaceta Social en 1895, La Idea Laboral en ese mismo año, El Perseverante en 1900, El Gráfico en 1903, El Independiente en 1904 y El Progresista en 1906”. Añadió que “EL TELEGRAFO ha acompañado la historia de nuestro solar, ha sido fuente de lectura y conocimiento de cuatro generaciones de sanduceros, sus páginas contienen la cotidianeidad de la vida lugareña, del país y del mundo y ha sido transmisor de los cambios a veces vertiginosos de nuestra civilización”.
“Desde nuestra fuerza política (Partido Socialista) de izquierda, que por esos avatares de la vida también inicia su vida orgánica hace un centenario, hemos sido reiteradamente críticos con la línea editorial de EL TELEGRAFO, lo hemos sido salvaguardando permanentemente y en forma inclaudicable el derecho sagrado a la libre emisión del pensamiento... .
Por eso hoy nos sentimos con las mayores credenciales para, desde este ámbito de la Junta Departamental, sede incuestionable de la soberanía política de los sanduceros, que por todo lo alto deseamos a EL TELEGRAFO una larga y proficua trayectoria de futuro...”.
Emotivas palabras
de francolino
En nombre de la bancada del Partido Nacional habló el edil Rubens Francolino, quien en determinados pasajes y en especial al mencionar a Fernando Miguel Baccaro -”para mí siempre será Fernandito”, dijo- las palabras se le entrecortaron por la moción. Comenzó diciendo que “este homenaje es una muestra orgullosa del apego que los sanduceros sentimos por las cosas grandes que queremos, porque nos distinguen como patrimonio que trasciende fronteras”.
“Desde que comenzó a vivir EL TELEGRAFO fue depositario de las esperanzas de una ciudad que se reencontraba con la paz nacional de principios del siglo XX, aunque con la memoria y el dolor todavía fresco de sus gestas heroicas. Los padres de aquella criatura editorial, Miguel A. Baccaro y Angel Carotini, ya soñaban con un diario proyectado al futuro, como heraldo de enormes y grandes causas, demoledor de errores y erigiendo respetos, haciendo centellar ante los ojos y el entendimiento del público las verdades que el pueblo debería conocer, propiciando la justicia, el orden, la moral, atacando el vicio y la corrupción cualquiera fuese su origen, porque así lo exigían y siguen imponiéndolo las normas elementales de convivencia ciudadana.
No se equivocaron sus fundadores, porque a poco de andar el matutino fue el verdugo tanto de la maldad como del desentendimiento comunitario. Esperado ansiosamente por los sanduceros, casi al pie de la imprenta, para alimentarse espiritualmente con sus editoriales y conocer cada vez la buena nueva en letras de molde”.
Subrayó Francolino que “han pasado ya 100 años de ese noviazgo no fácil de explicar entre EL TELEGRAFO y la gente, lapso que nos parece mentira a los mortales, siendo esa una de las tantas razones por las que agradezco a mi bancada, a mi Partido Nacional, el representarlo en esta instancia de recordación que muy oportunamente promoviera la edila señora Nilda Belvisi”.
Destacó que “desde el año 1935 -en que se crearon las juntas departamentales- ha venido cubriendo las sesiones de este deliberativo, convirtiéndose en el imprescindible vínculo con el público lector. En este ámbito es donde se vierten las más diversas opiniones de todos los partidos políticos y se pone de manifiesto claramente lo que significa la independencia y objetividad de la prensa que, en este caso, ha brindado igualdad de oportunidades a todas las filosofías y credos, sin censura alguna, asegurando la libertad de expresión y proporcionando espacios con generosidad, más allá de las circunstancias”.
“El diario nació y creció junto a los sanduceros -afirmó la edila- estuvo y está al servicio de la gente, de la comunidad, de su sentir, de sus proyectos, de las demandas frente a las diversas situaciones. Su permanente defensa y vigilancia de los principios esenciales que conforman un estado de derecho, un irrenunciable compromiso con el medio en que actúa, han marcado su camino y su destino. Tenemos la convicción de que en su independencia y pluralidad ha estado y sigue estando su fuerza y su vigencia”.
Refirió también que “ya Miguel Arturo Baccaro, cofundador de EL TELEGRAFO con Angel Carotini, recorría la campaña y recogía el requerimiento de los habitantes del medio rural, acercándose al lector a través de crónicas, narraciones y relatos”. Tuvo un recuerdo para Fernando J. Baccaro, Argentina Pesce y Fernando M. Baccaro, que ya no nos acompañan físicamente, así como para el administrador Enrique Baccaro y el director Fernando Alberto Baccaro Viñoly, el personal y los canillitas sanduceros, la evolución tecnológica de nuestro diario y el aporte de servicio a otras empresas editoras del Interior.
Expresiones del FA
Luis Lopardo fue quien habló por la bancada del Frente Amplio, afirmando que “cuando alboraba el siglo XX el Uruguay terminaba el período histórico denominado ‘comercial, pastoril y caudillesco. Las últimas guerras civiles que enfrentaron a los orientales terminaban dando paso a la ansiada estabilidad política, el Uruguay moderno amanecía de la mano de José Batlle y Ordoñez”.
Citó al historiador Barrán para precisar ese marco y orden que “se basaba en el respeto a la propiedad privada que englobaba el latifundio en la campaña, la creencia en que el progreso del país radicaba en el crecimiento hacia afuera, mediante la explotación de sus ventajas naturales...” y “por fin la creencia de que la marcha de la sociedad sería armoniosa si el Estado no interviniera para proteger a los débiles frente a los fuertes”.
Afirmó que “en ese marco, la sociedad sanducera no podía ser ajena a estas inquietudes y desafíos.
Las nuevas ideas que venían del viejo continente también se plasmaron en el campo de la prensa y así nace EL TELEGRAFO el 1º de julio de 1910. Eslabón de una cadena que había conocido antecesores, entre otras publicaciones, como El Obrero en 1879, El Pueblo en 1881, Gaceta Social en 1895, La Idea Laboral en ese mismo año, El Perseverante en 1900, El Gráfico en 1903, El Independiente en 1904 y El Progresista en 1906”. Añadió que “EL TELEGRAFO ha acompañado la historia de nuestro solar, ha sido fuente de lectura y conocimiento de cuatro generaciones de sanduceros, sus páginas contienen la cotidianeidad de la vida lugareña, del país y del mundo y ha sido transmisor de los cambios a veces vertiginosos de nuestra civilización”.
“Desde nuestra fuerza política (Partido Socialista) de izquierda, que por esos avatares de la vida también inicia su vida orgánica hace un centenario, hemos sido reiteradamente críticos con la línea editorial de EL TELEGRAFO, lo hemos sido salvaguardando permanentemente y en forma inclaudicable el derecho sagrado a la libre emisión del pensamiento... .
Por eso hoy nos sentimos con las mayores credenciales para, desde este ámbito de la Junta Departamental, sede incuestionable de la soberanía política de los sanduceros, que por todo lo alto deseamos a EL TELEGRAFO una larga y proficua trayectoria de futuro...”.
Emotivas palabras
de francolino
En nombre de la bancada del Partido Nacional habló el edil Rubens Francolino, quien en determinados pasajes y en especial al mencionar a Fernando Miguel Baccaro -”para mí siempre será Fernandito”, dijo- las palabras se le entrecortaron por la moción. Comenzó diciendo que “este homenaje es una muestra orgullosa del apego que los sanduceros sentimos por las cosas grandes que queremos, porque nos distinguen como patrimonio que trasciende fronteras”.
“Desde que comenzó a vivir EL TELEGRAFO fue depositario de las esperanzas de una ciudad que se reencontraba con la paz nacional de principios del siglo XX, aunque con la memoria y el dolor todavía fresco de sus gestas heroicas. Los padres de aquella criatura editorial, Miguel A. Baccaro y Angel Carotini, ya soñaban con un diario proyectado al futuro, como heraldo de enormes y grandes causas, demoledor de errores y erigiendo respetos, haciendo centellar ante los ojos y el entendimiento del público las verdades que el pueblo debería conocer, propiciando la justicia, el orden, la moral, atacando el vicio y la corrupción cualquiera fuese su origen, porque así lo exigían y siguen imponiéndolo las normas elementales de convivencia ciudadana.
No se equivocaron sus fundadores, porque a poco de andar el matutino fue el verdugo tanto de la maldad como del desentendimiento comunitario. Esperado ansiosamente por los sanduceros, casi al pie de la imprenta, para alimentarse espiritualmente con sus editoriales y conocer cada vez la buena nueva en letras de molde”.
Subrayó Francolino que “han pasado ya 100 años de ese noviazgo no fácil de explicar entre EL TELEGRAFO y la gente, lapso que nos parece mentira a los mortales, siendo esa una de las tantas razones por las que agradezco a mi bancada, a mi Partido Nacional, el representarlo en esta instancia de recordación que muy oportunamente promoviera la edila señora Nilda Belvisi”.
GRACIAS a la FAMILIA de DIARIO EL TELEGRAFO !!!
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